martes, 19 de junio de 2012

FIN DE SEMESTRE









El término del semestre, no sólo es dejar atrás todo lo vivido durante esos meses; es el punto de partida para una nueva etapa, analizar los errores cometidos, las caídas, los tropiezos... es tomar impulso para lo que se viene, ya sea la apertura de un nuevo ciclo escolar o el principio de desconocidos retos profesionales y laborales.



Es despedirse de lo que en su momento nos causó estrés, tomar un respiro y decir: "sí se puede...!!sí puedo...!!". Significa darte cuenta que, si   no fue un buen semestre, puedes hacerlo mejor para el que viene, porque después...después serás un estudiante de la vida, ya no un universitario, serás quien tenga que enfrentarse a situaciones problema sin recibir calificaciones como premio o castigo, ya no habrá oportunidad de exámenes extraordinarios...


Para nosotros, próximos integrantes del 9° semestre de Comunicación y Tecnología Educativa del ICE-UAEM, se nos hace un nudo en la garganta al saber que se acerca el cierre de un ciclo como alumnos universitarios, lleno de tareas, maestros buenos y malos, aventuras que nos llevaron a agradables y desagradables momentos, pero a la vez, nos da gusto  saber que, detrás de nosotros, vienen generaciones que serán capaces de emprender nuevos retos y dejarán huella como lo han hecho otras generaciones...como lo hemos hecho nosotros.


Les deseamos mucha suerte a ustedes y a todos los universitarios que hoy concluyen un ciclo escolar, esperando que la vida les depare mejores y muy gratos momentos.




Elaborado por:
Benitez Lira Ana Karen.
Cruz García Priscila Lizbeth.
Valencia Hernández Adriana.

FOTOGRAFÍA


Artículo elaborado por:
Barreto Villafán María Clara.
Porcayo Ornelas Diana Arely.
Salgado Pineda Ana Silvia.


RECOPILACIÓN

Elaborado por:
 Escobar Mendoza Mara. 
Navarrete Martinez Jorge Alberto. 
Portugal Olamendi Azucena. 
Rivera Carreño Roberto.

Ex Convento de Zacualpan de Amilpas


Este vídeo fue hecho para la materia de Comunicación y procesos de aprendizaje II del 8° Semestre de la Licenciatura en Comunicación y Tecnología Educativa del Instituto de Ciencias de la Educación de la UAEM.
Refleja la historia, arquitectura y rasgos característicos de este edificio.
La intención es que los alumnos conozcan uno de los mejores monumentos que forman parte de la RUTA DE LOS CONVENTOS DEL ESTADO DE MORELOS.

Elaborado por:

Barranco Cerezo Jair
García Ortíz Rosario
Labra Díaz Laura Leticia

sábado, 2 de junio de 2012

JOSÉ CLEMENTE OROZCO



Elaborado por:
Benitez Lira Ana Karen.
Cruz García Priscila Lizbeth.
Valencia Hernández Adriana.

viernes, 1 de junio de 2012

FRIDA KAHLO




Elaborado por:
Barreto Villafán María Clara.
Porcayo Ornelas Diana Arely.
Salgado Pineda Ana Silvia.

DAVID ALFARO SIQUEIROS



Elaborado por:

Barranco Cerezo Jair
García Ortíz Rosario
Labra Díaz Laura Leticia

DIEGO RIVERA


Elaborado por:
Escobar Mendoza Mara.
Navarrete Martinez Jorge Alberto.
Portugal Olamendi Azucena.
Rivera Carreño Roberto.

sábado, 5 de mayo de 2012

MUSEO DEL TEMPLO MAYOR

El Museo del Templo Mayor abrió sus puertas el 12 de octubre de 1987 y ha recibido, hasta ahora, a más de trece millones de visitantes. Su creación fue consecuencia de las excavaciones arqueológicas realizadas por el Proyecto Templo Mayor en su primera temporada, entre 1978 y 1982, las cuales se hicieron bajo la dirección de Eduardo Matos Moctezuma y permitieron recuperar una colección de más de 7,000 objetos, así como los vestigios del Templo Mayor de Tenochtitlan y de algunos edificios aledaños. Todo ello dio origen a la iniciativa de edificar un museo de sitio para exhibir dicha colección y, al mismo tiempo, complementar la visita de la zona arqueológica.

Este recinto se distribuye en ocho salas, cuatro en su costado sur y otras tantas en su costado norte. El proyecto museográfico original se basa en la distribución misma del Templo Mayor, en el cual se rendía culto a dos divinidades: a Huitzilopochtli, dios solar de la guerra y patrón de los mexicas, cuya capilla se encontraba en el lado sur del edificio, y a Tláloc, dios de la lluvia vinculado de manera directa con la agricultura, cuyo templo ocupaba el lado norte. De esa manera, las cuatro primeras salas están dedicadas a Huitzilopochtli y en un sentido amplio a la guerra, incluyendo los productos obtenidos por los mexicas a través de sus conquistas territoriales, mientras las cuatro últimas tratan sobre Tláloc, la agricultura y la explotación que los mexicas hicieron de los recursos naturales en general.

Al centro, en el segundo nivel del museo, se encuentra su pieza estelar: la gran escultura circular que representa a la diosa lunar Coyolxauhqui. Se trata de la joya principal del Museo del Templo Mayor, no sólo por su magnitud y belleza, sino porque gracias a su hallazgo accidental, ocurrido en la madrugada del 21 de febrero de 1978, dieron inicio las excavaciones del Proyecto Templo Mayor, cuyo fruto es todo lo que hoy día puede apreciar quien visita este lugar.



Sala 1: Antecedentes Arqueológicos

INAH

























Esta sala tiene por temática los trabajos realizados en el centro de la Ciudad de México, en el área que ocupó el Recinto Ceremonial de Tenochtitlan.

Los hallazgos van desde finales de la época colonial hasta los realizados por el Programa de Arqueológía Urbana.

En esta sala, el visitante podrá conocer los artefactos y esculturas encontradas a lo largo de la historia de las exploraciones en el centro de la Ciudad de México. Destacan la cabeza en basalto del dios Xólotl encontrada en Las Escalerillas, el Águila Cuahxicalli localizada en la Casa del Marques del Apartado, los recientes hallazgos realizados en la Catedral Metropolitana, así como tres ejemplos de los principales tipos de ofrendas encontradas en el edificio más importante de los mexicas. 





Sala 2: Ritual y Sacrificio

INAH

























En toda la actividad humana estaba impregnada por un profundo sentimiento religioso, por lo que el ritual formó parte inherente e indisoluble de la vida del hombre que quería comunicarse con sus dioses. Los rituales se celebraban conforme lo dictaba el calendario Tonalámatl y variaban en forma, contenido y duración dependiendo de la divinidad invocada. El ritual el, guardaba la esencia primigenia de morir para nacer; de morir para satisfacer al dios.

El visitante podrá conocer algunos de los objetos que formaron parte de los diversos rituales mexicas, algunos en el contexto de hallazgo, como la Ofrenda 17. Los rituales funerarios están representados con las denominadas ofrendas 10, 14, 34, 37, 39 y 44.

Estos rituales se caracterizan por la presencia de una urna o recipiente que contenía los restos óseos cremados, huesos de fauna, así como artefactos, algunos de los cuales fueron cremados junto con el difunto. Los objetos mexicas más antiguos, localizados en la etapa constructiva II del Templo Mayor, son precisamente dos urnas en cuyo interior había restos de huesos cremados; una de ellas hecha en obsidiana y otra en piedra tecalli: ambas corresponden a un mismo contexto funerario.

Otro de los temas abordados en esta sala es el ritual del autosacrificio, que consistía en perforarse ciertas partes del cuerpo, con navajillas de obsidiana, puntas de maguey o punzones de hueso. Una vez ensangrentados se colocaban en unas bolas de heno llamadas Zacatapayoli, como una ofrenda a los dioses.

También pueden observarse objetos relacionados con rituales como el sacrificio humano, como por ejemplo, los cuchillos-rostro, así como las impactantes máscaras-cráneo. Así mismo, se exhibe un grupo de cráneos de decapitados, los cuales presentan las características perforaciones en el temporal por las que se cruzaba una estaca para colocarlos en el altar Tzompantli. Además, estos cráneos presentan huellas de haber sido desollados, antes de ser exhibidos en dicho altar.

El visitante podrá conocer otros objetos relacionados con las ceremonias rituales, como los braseros, en los que se quemaba el copal, figuras hechas con esta resina, instrumentos musicales, collares y cuentas de adornos suntuarios, entre otros.


Sala 3: Tributo y Comercio
INAH





















En esta sala se pueden apreciar objetos producto del tributo, impuesto a través de la y también del comercio que los mexicasmantuvieron con diversos pueblos y que fueron depositados en las ofrendas por su valor simbólico. Algunas regiones fueron muy importantes para la actividad económica mexica, como por ejemplo, los yacimientos de obsidiana de la Sierra de las Navajas, en el actual Estado de Hidalgo, y la zona de Otumba, en el Estado de México, principalmente.

Con la obsidiana se fabricaban numerosos objetos: cetros, cuentas, orejeras, narigueras, bezotes, cuchillos, puntas de proyectil, navajillas, etc. La piedra blanca conocida como tecalli, provenía del actual estado de Puebla. La calidad de este material y su transparencia permitió elaborar objetos de gran belleza artística, entre los que destaca una máscara antropomorfa con aplicaciones de concha, figuras en miniatura y representaciones del dios Xiuhtecuhtli.

En esta sala se exhiben, además, objetos provenientes de la zona mixteca, como es el grupo de figurillas de piedra verde, conocidas como penates, y que representan, en su mayoría, al dios Tláloc. De la actual Oaxaca es un grupo de joyas hechas en oro y plata. Los objetos de coral, caracoles y concha, trabajada en relieve, son originarios del océano Pacífico, del Golfo de México y del Caribe mexicano. En esta sala, resulta sumamente relevante un enorme grupo de piezas llegadas de la zona de Mezcala, en el actual Estado de Guerrero, que representa máscaras, cabezas y figuras humanas de cuerpo entero.

Es importante señalar que en esta sala se exhiben objetos de culturas anteriores a la mexica, entre los que destacan las máscaras teotihuacanas y una máscara olmeca., Esta última es el objeto más antiguo encontrado hasta el momento en el Templo Mayor. Estos artefactos nos remiten a la recuperación del pasado, actividad muy importante para los mexicas.



Sala 4: Huitzilopochtli

INAH





Huitzilopochtli o el "Colibrí Zurdo" es el dios de la guerra, advocación solar y patrono de los mexicas. Bajo su tutela, este pueblo se convirtió en el más poderoso del ámbito mesoamericano durante el periodo Postclásico.

Era hijo de Coatlicue, hermano de Coyolxauhqui, la Luna, y de las estrellas, los Centzon Huitznahua, todos ellos dioses de inspiración mexica. Su sitio tan relevante en el Templo Mayor, da cuenta de la importancia que Huitzilopochtli representaba para los mexicas: la guerra y el tributo como parte del sustento económico.

En esta sala se exhiben diversos objetos relacionados con Huitzilopochtli. Destacan entre ellos el par de esculturas conocidas como los Guerreros Águila encontrados en La Casa de las Águilas, edificio religioso ubicado al norte del Templo Mayor. En fechas recientes los estudios del Arqueólogo Leonardo López Luján dan otra interpretación a estas figuras, llamándolos Hombre Águila, que representan al sol ascendente, o al Tlatoani que nace después de su elección como gobernante. 



Sala 5: Tláloc
INAH





















En este punto nos encontramos a la mitad de nuestro recorrido por el Museo del Templo Mayor: en el mundo agrícola, de la fertilidad de la tierra -junto con sus implicaciones económicas- que permitía al hombre alimentarse y en el que intervenían muchas deidades presididas por Tláloc.

El dios Tláloc, "el que hace brotar", era la representación del agua divinizada y de la fecundadora de la tierra, que residía en las más altas montañas donde se forman las nubes. Era una deidad benéfica que tenía también su lado negativo al enviar rayos, heladas, inundaciones y granizo, todo lo cual podía destruir las cosechas. Su más importante adoratorio se ubicaba en el Templo Mayor de Tenochtitlán, al lado de Huitzilopochtli y su culto era muy importante ya que de él dependía el sustento de las sociedades agrícolas. A Tláloc generalmente se le sacrificaban niños (en su mayoría, enfermos), por su similitud física con los tlaloque, diosecillos de cuerpo pequeño, ayudantes de este numen.

Con toda seguridad Tláloc es las deidad más representada en el Templo Mayor. Por su carácter acuático, se le asociaban diversos objetos como son: representaciones de remolinos de agua y rayos; caracoles, conchas, corales, peces y ranas, infinidad de jarras de piedra con su efigie, entre otros, muchos de los cuales provenían de diversas regiones tributarias y que se pueden apreciar en esta sala.

De este gran grupo de objetos encontrados en el lado correspondiente a Tláloc, destacan la conocida olla con la efigie de esta deidad, la representación de un Chac Mool, la escultura de un caracol marino y un relieve de Tláloc-Tlaltecuhtli.


Sala 6: flora y fauna
INAH





















Esta sala está dedicada a la flora y a la fauna encontradas en el Templo Mayor y en otros edificios del Recinto Sagrado. El haber rescatado ofrendas en las que muchos de sus objetos de dedicación eran animales y plantas, nos habla de la aguda percepción que los mexicas tenían de su propio entorno y el valor que le daban en relación a su mundo religioso. De hecho muchos de los dioses prehispánicos tenían cualidades y rasgos de animales, producto de esa observación minuciosa del ecosistema del cual el hombre forma parte.

Fueron diferentes los ecosistemas de donde procedía la fauna encontrada en las ofrendas del Templo Mayor: del ambiente templado de la Mesa Central eran originarios el águila, el puma, el lobo, las tortugas y las serpientes, entre otros; de las selvas tropicales: el jaguar, el cocodrilo, el tucán, el armadillo, etcétera; de las zonas de esteros, lagunas costeras y de los arrecifes coralíferos eran los pelícanos, diversos peces como el tiburón, barracuda, pez aguja, pez erizo, mantarraya, caracoles, conchas, corales y erizos, por mencionar sólo algunos ejemplares. Los mexicas conocieron bien el ambiente en que vivieron, lo manejaron y utilizaron ampliamente, además de incorporarlo a su vida cotidiana a través de numerosas manifestaciones.

Sala 7: Agricultura
INAH























Los mexicas lograron un gran desarrollo agrícola-urbanístico; por ejemplo, agrandaron el islote original por medio del sistema de chinampas, lo que les permitió una producción agrícola intensiva, la construcción de casas y edificios en estos terrenos ganados al lago. También trazaron calzadas, canales para el tránsito de canoas y construyeron caminos que entrelazaban distintos poblados con la Ciudad de Tenochtitlan.

La agricultura era una actividad que se regía por un sistema calendárico. Las ceremonias a los dioses tutelares de cada mes o veintena se regían por dicho calendario; muchas de esas fiestas estaban dedicadas a Tláloc y a los dioses de la fertilidad. Además de este numen, había muchas otras deidades relacionadas también con la actividad agrícola. Una de ellas eraChalchiuhtlicue, compañera de Tláloc. Otras deidades eran: Chicomecóatl, diosa de los mantenimientos; Xilonen, la diosa del maíz tierno; Cintéotl, dios del maíz en general; Xipe-Tótec, dios de la fertilidad; y Mayahuel, diosa del pulque y del maguey, entre muchos otros dioses, que intervenían de una u otra manera en el proceso de fertilización de la tierra.

Sala 8: Arqueología histórica
INAH





















A pesar de la conmoción producida por la destrucción y la muerte que acompañó a la Conquista española, la línea que marca el final de la época prehispánica y el inicio de la novohispana es tan sutil, que es posible observar en esta sala cómo algunos aspectos culturales netamente mexicas sobrevivieron por algún tiempo entreverados con el nuevo pensamiento europeo desarrollándose, con el tiempo, en nuevas formas y estilos que hicieron desaparecer poco a poco el mundo antiguo. Los objetos aquí exhibidos abarcan desde esos inicios de la colonia, hasta el siglo XX.

En las excavaciones del Templo Mayor, fueron encontrados muchos objetos correspondientes a la ocupación española. De los inicios de esta ocupación es una basa de columna* colonial que muestra la reutilización de esculturas prehispánicas con contenido religioso para la construcción de edificios novohispanos. También se hallaron escudos heráldicos usados por los nobles, tanto criollos como peninsulares, con el diseño correspondiente al apellido, mismos que eran colocados en las fachadas de las casas, con lo que se distinguía a una familia de otra.






Información tomada de: 



Artículo elaborado por:
Barreto Villafán María Clara.
Porcayo Ornelas Diana Arely.
Salgado Pineda Ana Silvia.

Museo del Templo


El Museo del Templo Mayor, es un lugar donde se muestra parte del patrimonio que nos ha sido heredado por nuestros antepasados, muestra de su grandeza, de su poderío. Indagar sobre nuestro pasado para lograr entender nuestro presente, así como el  interesarnos por la cultura, no es solo de intelectuales; es importante el darnos el tiempo de visitar el patrimonio cultural que hay en nuestro país y que no sabemos que existe. Es interesante el conocer pequeñas partes de obras literarias por ejemplo:

La Leyenda de Huitzilopochtli
Cuenta la leyenda que Huitzilopochtli nació revestido con ropaje de guerra.: un escudo, sus dardos y su lanzadardos de color azul.
Sobre su cabeza llevaba un plumaje con orejeras. En su pié izquierdo tenía una sandalia adornada también con plumas. Sus muslos y sus brazos estaban pintados de color azul.
Este raro acontecimiento ocurrió, debido a que la madre de Huitzilopochtli, La diosa Coatlicue, que había tenido ya una hija llamada Coyolxauhqui y a otros cuatrocientos hijos que se convirtieron en estrellas, llamados surianos, volvió a quedar embarazada cuando la tocó una bola de plumas que cayó desde el cielo.
Coyolxauhqui y sus cuatrocientos hermanos consideraron este hecho como un agravio y decidieron entre todos matar a su propia madre.
Cuando la diosa Coatlicue se enteró de los macabros planes de sus hijos se sintió muy triste y vivía presa del miedo, esperando su muerte a cada instante, pero Huitzilopochtli, la tranquilizó hablándole desde su vientre y ella se calmó.
Los surianos se prepararon para matar a su madre como si fueran a una guerra, pero uno de ellos, llamado Quauitlicac, sintió pena por su querida madre y le contó al bebé por nacer, Huitzilopochtli, la traición que estaban preparando sus hermanos.
Cuando tenían todo preparado para aniquilar a su madre, nació Huitzipochtli, revestido para guerrear. Ahí mismo, hirió gravemente a su hermana Coatlicue, luego le cortó la cabeza y la arrojó hasta el cielo, transformándose en la luna. Más tarde persiguió a los surianos y a los que no lograron escapar, los mató y los convirtió en estrellas.
Huitzipochtli, les quitó las armas y las vestiduras y se las puso él encima, más tarde se convirtieron en sus distintivos.

Podemos darnos cuenta que, desde mucho tiempo atrás, la religión y la espiritualidad ya existía en el seno de esta cultura Mexica, una muestra de ello es la variedad de deidades que tenían:

Principales Dioses de los Mexicas:


TEZCATLIPOCA, DIOS DE LOS DIOSES
 Es llamado " noche y viento, el arbitro, el que piensa y rige por su propia voluntad”. 


HUITZILOPOCHTLI, DIOS DE LA GUERRA
Se convirtió en el sol, señor de la guerra, quien para vivir necesita ser alentado con sangre.


QUETZALCOATL
Quetzalcóatl, dios único, dual y múltiple,  estrella de la tarde y al mundo de los muertos,  el creador de las cinco edades cósmicas.


CHALCHIUTLICUE, DIOSA DEL AGUA VIVA
Su nombre quiere decir " la falda de jade ", Chalchiutlicue era la compañera de Tláloc dios de la lluvia: tenían poder sobre las aguas. 




TLALOC, DIOS DE LA LLUVIA
Tláloc quiere decir " néctar de la tierra " ; fomentaba la agricultura.


XOCHIQUETZAL, DIOSA DE LA BELLEZA Y EL AMOR
Xochiquetzal significa " flor preciosa”. Se le rendía culto con sacrificios humanos, particularmente de jóvenes doncellas y de niños.


XIUHTECUHTLI, DIOS DEL FUEGO
Las víctimas que se ofrendaban primero eran anestesiadas  y luego arrojadas al fuego.



CINTEOTL, SEÑOR DEL MAIZ
Se le atribuía un origen divino, era hombre y mujer. En su personalidad masculina era marido de Xóchiquetzal, diosa del amor y la belleza. Torquemada opinaba que era una diosa de fertilidad y compañera del sol.



Mostremos interés, conozcamos más sobre las distintas culturas que florecieron en nuestro país, nos daremos cuenta de lo impresionante e interesante que resulta conocer pequeños detalles que han dado sentido a la sociedad en la que ahora vivimos.


Elaborado por:
Benitez Lira Ana Karen.
Cruz García Priscila Lizbeth.
Valencia Hernández Adriana.








ANTIGUO COLEGIO DE SAN ILDEFONSO



El Antiguo Colegio de San Ildefonso es patrimonio universitario. Desde 1992 lo administra un Mandato tripartita integrado por la Universidad Nacional Autónoma de México, el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes y el Gobierno del Distrito Federal. 


A partir de marzo de 1994, el Antiguo Colegio de San Ildefonso es un proyecto permanente, cuya nueva vocación como centro cultural le ha permitido llegar a ser un lugar de excelencia.


Misión:


Realizar exposiciones temporales que den a conocer y difundan el acervo arqueológico, histórico y artístico de México y de otras culturas. 
Ofrecer al visitante una experiencia rica y novedosa que, a partir de las obras artísticas fomente el aprendizaje y propicie un ambiente placentero y agradable, que atienda las preferencias, inquietudes y necesidades del público. 
Atraer un número cada vez mayor de visitantes, mediante la difusión y promoción de las exposiciones y de las actividades complementarias. 
Participar activamente en la revitalización cultural del Centro Histórico de la ciudad de México.












 Exposiciones



Murales:

El nacimiento del Muralismo Mexicano en San Ildefonso
Orígenes del movimiento muralista mexicano Para encabezar la recién creada Secretaría de Educación Pública, Obregón nombró a José Vasconcelos (1881-1959), quien ocupó dicho cargo del 10 de octubre de 1921 al 28 de enero de 1924. Como parte de su programa, Vasconcelos se propuso educar a las masas por medio de ideas e imágenes plasmadas en los muros de edificios públicos.


Un grupo de artistas plásticos dispuesto a sumarse al proyecto obregonista participó en la "decoración" de los muros de la Escuela Nacional Preparatoria. La Creación de Diego Riveramarca el punto de partida del Muralismo Mexicano. Jean Charlot pintó Masacre en el Templo Mayor, Fernando Leal La fiesta del Señor de Chalma, David Alfaro Siqueiros Los elementos, Los mitos, El entierro del obrero sacrificado y El llamado a la libertad, Ramón Alva de la Canal El desembarco de los españoles y la cruz plantada en tierras nuevas y Fermín Revueltas Alegoría de la Virgen de Guadalupe. 



La participación de José Clemente Orozco en el proyecto de la Preparatoria inició en 1923 y concluyó en 1926. En ese periodo, pintó los muros norte de los tres pisos del patio principal así como los del primer descanso del cubo de la escalera.



Entre 1930 y 1942 Fernando Leal realizó la obra Epopeya bolivariana en el vestíbulo del Anfiteatro.


























La alteridad en el espejo

Johan Falkman aceptó, desde temprana edad, los signos y símbolos que permean sus retratos.

En sus obras podemos reconocer al sujeto retratado, pero no porque sea una copia fiel, sino porque es la concepción que de él nos ofrece; con sus honduras psicológicas, su penetrabilidad o su inaccesibilidad, su desnudez mental y espiritual, logradas con pinceladas sueltas, gruesas, largas que, como si fuera una toma instantánea, nos brinda una mirada a la identidad del retratado, desde la interpretación del pintor.
   
Más de 90 obras realizadas entre el 2003 y el 2012, que muestran la mirada plástica de Johan Falkman, quien se ha distinguido por reactualizar el género del retrato y el estilo expresionista enmarcados por la tradición pictórica occidental. El público mexicano podrá disfrutar las “fantasías” estéticas de Falkman a través de un recorrido de contrastes cromáticos, formales y de espacios composicionales que muestran las implicaciones del retrato: la eternidad, la temporalidad y la inmortalidad.ad de su observación.






Elaborado por:
Escobar Mendoza Mara.
Navarrete Martinez Jorge Alberto.
Portugal Olamendi Azucena.
Rivera Carreño Roberto.






CENTRO CULTURAL DE ESPAÑA MÉXICO








           
El Centro Cultural de España en México se encuentra localizado en el Centro Histórico de la Ciudad de México, México. El centro se enfoca al arte contemporáneo (principalmente iberoamericano) teniendo como base los siguientes objetivos: apoyar a la recuperación del Centro Histórico de la Ciudad de México, fomentar las industrias culturales,
promover valores de convivencia, de identidad y la creatividad cultural, además de apoyo al patrimonio cultural indígena.


Dentro de este Museo se encuentran los restosde Calmécac, antigua escuela donde estudiaban los hijos de gobernantes y nobles mexicas, fue mostrada al público con sus 88 piezas representativas de las etapas prehispánica, colonial y moderna; se exhiben en el recién creado “Calmécac” Museo de Sitio del Centro Cultural de España en México. Un edificio del Centro Histórico de la Ciudad de México, donde conviven armónicamente el pasado y el presente, alberga los vestigios de lo que fuera el Calmécac de la antigua Tenochtitlan.

Este Centro es multidisciplinario y abarca diversas actividades relacionadas con la cultura y el arte como: exposiciones, actividades infantiles, laboratorio de proyectos, asesoramiento de proyectos culturales, entre otros.

Servicios: Exposiciones, laboratorios de proyectos, Asesoramiento en proyectos culturales, programación
infantil, formación especializada, restaurante, auditorio, tienda, sala de lectura y biblioteca.






Actividades: Exposiciones, cine, humanidades, música, artes escénicas, actividades especiales,formación, actividades infantiles, arte y nuevos medios, música.









Como llegar: 
El Centro Cultural de España está situado en pleno Centro Histórico de la Ciudad de México, en la calle Guatemala 18, a escasos metros del Zócalo y justo detrás de la Catedral Metropolitana. Las estaciones de metro más cercanas son Zócalo y Allende, ambas de la Línea 2.

Dirección: Guatemala No. 18, Centro Histórico.
CP 06010, Ciudad de México.
Tel: (55) 5521 1925 al 28
Fax: (55) 5521 1919

http://www.ccemx.org/index.html


Artículo elaborado por:

Barranco Cerezo Jair
García Ortíz Rosario
Labra Díaz Laura Leticia